Tuesday, March 06, 2007

En el medio de dos medios.

Por Mauricio Riveros

La pornografía es a Internet como las noticias a los portales informativos. Inundan. Tal vez, por ese motivo, se crea equivocadamente que el ejercicio periodístico en la web debe ser un ejercicio simple y poco profundo. Pero esta falsa creencia no es culpa de la red, claro que no, es culpa de las noticias.

Nunca en televisión, ni en radio, ni en televisión, ni en prensa, ni en televisión, ni en televisión, ni en televisión, la noticia ha sido un viaje que busque llegar al fondo de la información, para eso existen otros géneros, géneros que parecen perdidos en el mundo digital.

Esta tendencia de crear noticias, breves, noticias, tips, noticias y noticias ha creado por un lado una zona de confort, donde los periodistas simplemente se remiten a transformar información y embutirla en unos cuantos píxeles, y a las empresas de información a eliminar la calidad de los productos bajo la premisa de que “el lector web no se demora en los textos”.

Esto ha generado, sobre todo en lugares como Latinoamérica, que el periodista digital sea visto por debajo del old School, no solo por sus compañeros, sino en muchas ocasiones, por la misma audiencia. ¿La razón? Hay muy pocos periodistas digitales, las mayorías son periodistas que se dedican a colgar noticias en la web.

Aquí es dónde esta diferenciación cobra bastante importancia, puesto que un periodista que cuelga noticias en la red se termina frustrando, amenguando el espíritu de la reportería, confiando demasiado en sus fuentes, siendo frustrado, mediocre, frustrado y frustrado. Pensando que el medio es plano y por eso su trabajo menos importante.

Por el contrario el periodista digital es consiente que su medio es diferente, más activo, más pasional, con la posibilidad de ser global. Por lo tanto sorprende, usa los lenguajes clásicos para crear uno nuevo y multimediático, aprovecha los géneros, el nuevo periodismo, transforma no recicla.

Afortunadamente, las nuevas corrientes del periodismo se han apropiado del lenguaje digital, lo han hecho propio y están nutriendo en muchas partes del planeta esta ya no tan nueva escuela de periodismo, las noticias, muy importantes como siempre, no son el único género que se usa en la red, u otros medios donde se lleve a cabo el discurso digital, sino que la crónica y los reportajes, por solo nombrar un par, han ganado espacios llenos de calidad donde los periodistas digitales aprovechan la integración de discursos para generar productos contundentes y exitosos.
El futuro de los medios está ahí, en la red, cada vez es más fácil ver como los medios digitales se transforman y dejan de ser el clónico del papel, radio y tv, la hipervincularidad permite personalizar a las audiencias la información a su antojo, siguiendo rutas preestablecidas o desviándose según sus propios criterios. Todo converge y los periodistas que están el la mitad del cambio deben lograr la transición y volverse buenos periodistas digitales, aprender, entender e informar, y no seguir en el confort de los periodistas que trabajan para Internet pegando retazos.

Tuesday, November 28, 2006

Réquiem por SEGA
Por Mauricio Riveros

1991- después de un entrenamiento, algunos años atrás en el mundo de las consolas, una nueva generación que duplicaba la capacidad de los sistemas vigentes, Master System, Nes y el piratisímo Family, aterrizaba en Colombia, Sega nació para mí.

Un Atari 2600 (que aún conservo) y un Nintendo Nes, reposaban cerca del televisor de la sala y me hacían enviciar salvajemente dándole al al Bobby Going Home y al Bermuda para 2600, y al Kun Fu, Mario Bros, Metal Gear y Double Dragon para la Nes. En ese entonces, en una tienda de barrio, un ingeniero o técnico electrónico parió una mutante arcade de botones tricolor y que por dentro tenia nada más y nada menos que un SEGA GENESIS, si en Mayúsculas y con reverencias.

Esta maquina, no el arcade sino la Genesis que llevaba en sus entrañas, definitivamente, era una maravilla de la tecnología. Un diseño robusto y ambicioso vestido de negro elegante, con una pequeña aplicación roja y un led del mismo color, dos puertos para los controles, en los cuales puedo dar fe de que funcionaban los sticks de la 2600, una ranura para insertar los cartuchos y un letrero en relieve, gris plata, que decía 16 bit.

Pues sí, volviendo al tema del arcade, (que ya entrados en confianza llamaré maquinita), era una putería, con una moneda de 20 pesos, podía jugar por un minuto y medio las apasionantes aventuras de Sonic, con unos gráficos llenos de color, con excelentes animaciones y, la posibilidad de ir hacia atrás en la pantalla, cosa que hacía que me llenara de codicia y deseará la consola y, con el perdón de Mario, los hermanos Billy y Jimmy, Bobby y el “kunfuteca” Thomas y su novia Sylvia, el manejo del fantástico y querendón erizo azul.

No fue poco lo que hice para obtener la consola, sumergirme en la ñoñez del colegio, ayudar en mi casa, no pelear con mi hermana y otras cosillas que suelen pedir los padres para darle gusto a los hijos, gusto que no comprendían, sobre todo cuando yo tenía ya en mi casa un par de consolas. Sin embargo les contaba del doble de su potencia, de sus gráficos, de mi delirante debut en la maquinita del barrio con el erizo y al final, en diciembre, accedieron a mi pedido y “la negrita” llego a mis manos, San Andresito fue el lugar de la compra, el paquete que compré, o mejor mi padre y mi madre me compraron, era del putas; una consola, dos mandos y el cartucho de… ¿adivinan? Por supuesto Sonic. Realmente no fue por que mis padres me parar bolas con la lora que yo daba, realmente fue por el juego lo regalaban con la consola, sin embargo es el regalo que más recuerdo con alegría, de toda mi infancia.

De hay en adelante todo fue la locura, a pesar de que el Super Nintendo llegó con furia al mercado nacional y se masificó diez veces más rápido que la Genesis, poco me importo, después de culminar las aventuras del erizo, en la ciudad de Tocaima, en unas templadas vacaciones familiares, mi codicia siguió en aumento. Ecco the Dolphin, Street Figther, Mortal Kombat, Mortal Kombat II, fueron mis siguientes títulos, al igual que los apéndices, Game Genie (un cartucho que permitía engañar los juegos para obtener vida infinita y otros trucos) y la Menacer: un arma con un diseño soberbio que compré en un pack con Terminador 2 y que permitía dispararle a la pantalla.

Contrariamente a lo que pensé, mis padres no me retiraron el patrocinio. Es más, convencí a mi madre para que me comprara un Super Nintendo, aunque mi colección de cartuchos y accesorios se vio truncada, cuando Betatonio llegó a nuestras vidas y empezó en forma el alquiler. Poco después SEGA lanzó al mercado su unidad de CD, un lujo que otra vez mi padre me patrocinó, esta vez directamente en el almacén de Sega una tienda que me dolió en alma cuando se fue de Bogotá.

(Continua....)

Monday, November 27, 2006

Y aquí vamos de nuevo….

Los bits y los bytes danzaban sin parar dentro de los cuarenta gigas del disco duro de una notebook. Nombres, secretos, personalidades políticas y públicas, codificadas en código binario eran evidencia digital de que en la nación del sagrado corazón y del divino niño, había algo podrido, muy podrido. Sin embargo, y lo más preocupante, es que esta situación no era sorprendente, es más era algo cotidiano.
Páginas de periódicos, revistas, blogs y websites, mostraron la noticia como el gran descubrimiento, ¡los paras están en la política! ... que fuerte ¿o no?.

Independencia, fue el grito que saturó las gargantas de los padres de la patria, por allá en la época de la "independencia", grito soberbio que los librillos de historia de primaria prensaron, prensan y prensarán llenándolos de arrodilladas reverencias al hecho, para que desde infantes, nuestra ignorancia crezca y lo peor se sustente bajo la mentira de que somos un pueblo libre.

Ni libres, ni libertarios, ni nada. El sueño Bolivariano es ahora la pesadilla tercermundista, en la que vivimos y nos mantenemos, esa que no cuentan los librillos de historia ni la parla romántica de los abuelos. ¿Independientes de qué?, ¿de credo?, ¿de idioma?, ¿de sistema político?... seguimos siendo esclavos, solo que de nosotros mismos, a lo que tenemos que sumarle que nos hemos convertido en una nación sumisa hacía el norte y el occidente y ahora buscamos hacer lo mismo con el oriente y hasta con el sur.

Pero desde Bolívar, “El Frustrado”, todos los padres de la patria han sabido aprender al pie de la letra la lección: Corrupción e incompetencia cubiertas por el antifaz del heroísmo. ¿Y las audiencias qué? La mayoría, como borregos, crédulos e impávidos, cambian su atención cuando se les pone un partidito de fútbol o nalguitas y tetícas y, los pocos que se cuestionan, de diestra a zurda sin importar, o se fumigan o se censuran. Al final, todo igual.

¿Y los medios y su función informativa qué? Divididos, en su mayoría, en dos grandes tendencias, la primera: la mediocridad. Reciclar y volver a decir lo que se ha dicho en cables y confundir la reportería con la entrevista. Y sí, así son, o mejor, somos, la prensa del clic. Clic en la grabadora y lista la nota, clic en el website y ya está publicada. ¿y el contexto?.. ja ja ja ja ¿Qué es eso? Dirían muchos colegas, el periodismo investigativo en Colombia, se destaca más por suerte de encontrarse con la chiva que con el verdadero ejercicio de meter el dedo en la llaga.

La otra tendencia es más terrible, más tirana, más absurda. Es aquella dónde manoseamos la información, donde un editor le corta las alas a los pocos que se atreven a sacarlas, donde se confunde a las audiencias, donde se manipula, donde se esconden las noticias, donde el periodista deja de ser un noble artesano para convertirse en una puta de la información, un puta exigente y manipuladora, que no se conforma con trasgredir todo lo que toca sino, que la mayoría de las veces, lo hace de una manera anónima.

La noticia es una, el problema es que ya no es noticia, para nadie, medianamente astuto y suspicaz, era un secreto que parte del congreso y la empresa privada estaban y están salpicados con el para-militarismo. ¿Qué se puede analizar de un cubrimiento de medios?, en mi caso, poco más a lo que ya he dicho, que la web editorializa más y que es más inmediata, pero poco contexto y poco seguimiento en ambos casos.

¿Y de la noticia que? Que los paramilitares están metidos en todo, como en otrora lo hizo el narcotráfico y la guerrilla, mientras tanto los staff de investigación sacan enormes titulares y entradillas creativas contándonos sus descubrimientos con un tono onomatopéyico, ¡! ¡! ¡! Extra ¡! ¡! ¡! , boom, el otro 8000, todo igual, del título al final del artículo, opinión por encima de información, especulación y lo peor… un aire de sobrades donde se jactan de su descubrimiento informativo, descubrimiento igual de chimbo, como el de Bolívar con su independencia.

Friday, October 20, 2006






Recortando la realidad
Por Mauricio Riveros



Christian Escobar Mora ha logrado, poco a poco, convertirse en un referente de la actualidad fotográfica colombiana. En el camino que ha recorrido a puesto sus fotos en libros, calendarios, galerías, exposiciones y revistas, no solo en Colombia, sino en varias partes del globo y ha obtenido varios reconocimientos por importantes instituciones, entre ellas, La Revista National Geography.

El comienzo

En el cumpleaños numero seis de Christian las cosas sucedieron de una manera atípica. Aunque había confites, torta y juguetes a él nada de esto le importó; Solo le interesó el objeto que sus padres se ponían en el rostro, que hacia un ruido extraño y que destellaba una intensa luz.

Desde ese día se despertó en él una pasión incansable por el oficio fotográfico, pasión que, 22 años después, conserva y sigue intacta, al igual que la cámara Comet, la misma que conoció en su sexto cumpleaños y que en los siguientes años de infancia secuestraba, cada que podía, para robarse las últimas tomas y hacer sus primeras fotos.

El resto de su vida continúo ligado a las cámaras, en el bachillerato fue el fotógrafo del colegio, estudiando Diseño Grafico siempre se encaminó por los énfasis fotográficos y precisamente su tesis, Sagrado, que como él mismo define, “Es un recorrido por la muerte cotidiana”, fue la llave de entrada a la fotografía profesional.

Su trabajo

Con el cráneo rasurado, gafas tipo piloto y vestido de camiseta y jeans ajustados, Christian llega casi todas las mañanas a la redacción de su trabajo o las aulas donde implanta clases. Hoy en día es foto reportero de las revistas Cromos y Shock y profesor de fotografía.

Cuando no está trabajando, se dedica a experimentar con todo lo que encuentra, todo lo que ve, todo lo que siente o todo lo que encuentra, para producir sus fotos personales. Y es precisamente eso, según los que mejor lo conocen, uno de los ingredientes que hacen de Christian lo que él es en la fotografía. La pasión que le imprime a todo lo que hace.

“Christian es uno de los buenos fotógrafos que tiene esta generación. Es un fotógrafo muy pilo y siempre esta haciendo fotos interesantes, moviéndose en la fotografía. Hay muchas cosas de las fotos de Christian que tienen fuerza y que denotan ese compromiso que él tiene por la imagen” Cuenta William Fernando Martínez, fotógrafo de AP (Associated Press), y amigo.

Llegar a la revista fue inesperado para Christian, aunque había sido profesor de fotografía en un colegio y ya había participado de algunas exposiciones, no tenía experiencia en la reportería. Sin embargo, DeSeso y Sagrado, sus trabajos universitarios, fueron carta de presentación suficiente para que Cromos se fijara en él y lo fichara como parte de su staff.

Estos trabajos eran fotos de cadáveres, intervenidas con documentos, radiografías y otros elementos de su propia cotidianidad, que buscaban generar en el espectador una reacción, crítica pero positiva, de la muerte sin que la foto perdiera su carácter artístico.

“La muerte es algo tan cotidiano como la vida, lo que pasa es que la gente quisiera creer que no es así. Se te fijas bien la muerte esta en todo lado, en lo que comemos, en nuestros vestidos, el lo que vemos y hasta en el dinero que manejamos diariamente, simplemente hay varias formas de mostrarla y de verla, yo quería demostrar con Sagrado esa cotidianidad que a veces pasamos por alto de una manera estética. Cuando alguien mira una foto de muertos, o le gusta o la odia, pero nunca le pasa desapercibida.” Asegura Escobar Mora.

Pero el cuento de Christian con la muerte no terminó ahí. En muchas otras de sus producciones se nota este gusto e incluso hay proyectos futuros. Una extraña serie de fotos de animales muertos encontrados en carretera y un cuento que quiere ser novela, ya estan en producción pero ni el mismo sabe si algún día estas obras sean públicas.

Desde su llegada a las revistas Christian se empezó a hacer un espacio en el espectro fotográfico nacional y, aunque su pasión es un motor inagotable, no es lo único que hace de él fotógrafo especial. Como cuenta Nelson Sierra, Editor fotográfico de Cromos y El Espectador “Christian tiene mucho talento y eso hace que él siempre haga un buen trabajo” y Sofía Sánchez, Coordinadora editorial de la revista Shock, “El Calvo es un tipo excelente, no solo como fotógrafo sino también como persona, siempre tiene una mirada diferente de todo, de cualquier tema, tiene un estilo único demasiado bueno”

Estilo que, confiesa Escobar, ha sido labrado por lo que ha visto, no solo en otros fotógrafos, sino también en el cine, los comics y cualquier otra expresión artística clásica o moderna. “El estilo, en esta profesión, es algo que se va formando sólo, con todo lo que rodea a cada fotógrafo, lo visual y la propia vida. Por ejemplo, en mi caso, el cine, o los comics. Me gusta de la fotografía clásica la luz natural, la ley de tercios y la búsqueda de fotos naturales no posadas, sin embargo cuando siento que una foto queda mejor saliéndome de los esquemas simplemente lo hago. Yo no se si mis fotos ya tienen un estilo distintivo, pero uno siempre espera que cuando la gente mire las fotos que uno hace sepa de quien son. ”

La vida sin la cámara

En su vida cotidiana, Christian es un hombre común. Vive con Hanna, su novia desde hace seis años y Sombra, su perra pastor Aleman, en un apartamento cerca al centro de Bogotá. Aunque asegura que no es radical pocas veces usa un color que no sea negro, blanco o rojo y aunque le gustan las artes marciales y la simbología militar odia la autoridad y nada le molesta más que ver a un hombre golpeando a un animal.

Aunque no es muy buen bebedor, la cerveza le gusta, y en algunas esporádicas ocasiones se toma algunas con los amigos. Eso sí, el cigarrillo a veces acompaña a las birras, dependiendo que época del mes sea ya que todos los meses deja de fumar por unos días.

Como buen diseñador gráfico, se la pasa pendiente de todo lo visual y, aunque no lo ejerce en el sentido estricto de la palabra, de vez en cuando le gusta dejarse llevar por el dibujo, la ilustración y la creación de camisetas y a la hora de la música el rock, el punk, el reggae y el ska son sus favoritas y desde hace un par de meses anda embobado por las motos.

Sin embargo, aún ninguna moto, ha logrado ser tan importante para él como lo son sus fotos y, volviendo al tema, aunque hay que aceptar que las menciones y premios que ha obtenido en National Geography, Los Niños de mi Tierra, Colombia Imágenes y realidades y la fundación Dos Mundos entre otras y, las exposiciones en La Universidad Nacional, en El Museo Nacional, En Texas y en otras galerías nacionales y extranjeras han ayudado, los que lo conocen saben muy bien que son la pasión, el talento y su estilo los tres ingredientes que han logrado posicionar a Christian Escobar Mora donde está ahora.

Tuesday, September 05, 2006

Ensayo

La labor periodística en el universo digital
Por Mauricio Riveros

La convergencia es, sin temor a equivocarme, el principio fundamental del mundo digital. Como era de esperarse, esta peculiaridad, trasciende a todo lo que toca. Inclusive, la información.

Es por eso que en la actualidad los redactores, digitales y tradicionales, deben estar al día con el uso y el manejo de la información y las nuevas formas de publicarla.

Sin embargo, el rol que está jugando y jugará en el futuro el periodista no es muy claro, puesto que en algunos sectores la prensa digital no es vista con la misma seriedad que el oficio periodístico tradicional y los propios comunicadores, todavía siguen adaptándose a esta, ya no tan nueva, forma de trabajo.

Aunque esto es una realidad global, algunos lugares, como Latinoamérica, sufren un poco más la adaptación a esta forma de trabajo. En el continente, Las frías cifras muestran deficiencias en todos los campos, sin embargo ninguna cifra puede ser tan gráfica como la experiencia real de laborar en un puntocom.

Una investigación llevada a cabo por Julio César Guzmán y Guillermo Franco (con el apoyo de la Sociedad Interamericana de Prensa, Grupo Diarios de América y la Fundación para el Nuevo Periodismo Iberoamericano), dibujó un poco el diario vivir de los reporteros on line en la región.

Si bien es cierto en América Latina existe un contexto diferente con respecto a otras regiones, el rezago que se vislumbra a escala profesional, es en la actualidad también un factor importante.

Si nos embarcamos, superficialmente en el tema, podemos ver como hay algunos factores que juegan en contra del periodista digital. Uno de ellos es el acceso a Internet. En Colombia, la penetración de Internet es escasa, inclusive comparada con otros países de la región, por lo tanto muchos usuarios simplemente no tienen acceso a esta información.

Pero el problema no solo es de acceso, la tradición también es un factor que pesa a la hora de digerir la información. En esta nación todavía hay un gran porcentaje de personas que necesitan de un impreso, o de la radio o la tv, para tener credibilidad sobre la información, los medios digitales no generan tanta credibilidad puesto que al ser un medio nuevo la gente aún desconfía de ellos.

Esto da pie para que las fuentes y los clientes comerciales sigan prefiriendo los medios tradicionales sobre los puntocom. En mi caso personal, en el ejercicio profesional, tanto los primeros como los segundos, prefieren que la información generada por un medio sea reflejada en el impreso más no en la versión digital, puesto que no creen en la penetración del medio virtual.

Contenidos, perfil profesional e ingresos, los temas que hacen la diferencia.

Con un marco como el anteriormente citado y, apoyado en estudio de Guzmán y Franco, es fácil imaginarse las condiciones actuales en que se mueve un periodista de puntocom.

Un primer estadio del que quiero hablar es de los contenidos. En la región es muy difícil desprenderse del medio original a la hora de alimentar contenidos para web. Muchos medios, yo diría la mayoría, aun creen que las plataformas digitales deben ser un espejo de la información que se maneja en el medio original, por la tanto se genera una comodidad mal sana puesto que muchos editores y redactores web se dedican exclusivamente a hacer una mimesis del impreso para colgarla en sus portales.

Esto en vez de ayudar y democratizar la información, genera un desperdicio del medio, puesto que se pierde la posibilidad de potenciar un medio propio con contenidos exclusivos para convertirlo en un clon editorial, que existe, por el simple motivo de tener presencia en la web.

El siguiente eslabón de esta cadena es el perfil de los profesionales encargados de los puntocom. Si bien es cierto no se puede generalizar, las cifras y la realidad, muestran que gran parte de los staffs de redacción on line están cubiertos por periodistas practicantes y sin una formación especifica en el discurso web, quienes van aprendiendo en tipo de trabajo, más de forma empírica que académica.

Aunque esto no es necesariamente un defecto, si es un punto que muestra la negligencia con que muchas de las grandes empresas editoriales desdibujan la labor del periodista digital, ya que no toman con la misma seriedad el trabajo realizado para la web comparado con el que se realiza para los medios tradicionales.

Esto retumba también en la labor del periodista, puesto que las temáticas y el tratamiento con el que se manejan los temas que trabajan para los dos tipos diferentes de medios, son jerarquizadas. En la mayoría de los casos los temas más importantes y que exigen mayor reportería son exclusividad de los impresos, dejando para los puntocom, los temas más inmediatos pero tratados con poca profundidad.

Finalmente otro tema que genera malestar entre los periodistas digitales son los ingresos. Tan solo un pequeño porcentaje de los redactores encargados de los sitios on line reciben una paga igual o superior a la de los demás periodistas. Estas diferencias ayudan enormemente a que la labor del periodista web sea vista como inferior comparada con el periodista tradicional. Adicionalmente a esto la mayoría de equipos comerciales, siguen viendo a los sitios web, como la fea del paseo, por lo tanto no hacen mucho énfasis en vender publicidad para los sitios haciendo más difícil que estos tomen la fuerza y la autonomía necesaria.

El futuro

Es claro que el futuro de los medios va a cambiar, y aunque en la región llegará un poco más tarde, llegará el día en que los puntocom se logren independizar en varios sentidos del medio tradicional. Cuando esto se consolide, el imaginario que se tiene hoy en día cambiará. Por un lado los staffs de redacción on line serán vistos, no como un añadido obligatorio, sino como uno de los cuerpos más robustos dentro del medio y solo aquellos periodistas que logren ser convergentes, tanto para los impresos como para los medios digitales, serán los que muevan la información a todo nivel.

Pero para que esto sea claro, tanto los encargados de los medios como las audiencias, deben de apropiarse del medio y, los actuales periodistas digitales, deben salirse un poco de la zona de confort en que se encuentran, y generar contenidos más elaborados y con mayor profundidad, aprovechando la gran ventaja multimedia que se tiene.

Hoy, afortunadamente, ya hay varios equipos pioneros que están generando información exclusiva y de calidad, ahora solo hay que esperar, que estas buenas costumbres se contagien para que la web deje de ser vista como un complemento y se convierta, de una vez por todas, en otro medio más.

Wednesday, August 23, 2006


Píxeles que seducen
Por Mauricio Riveros

Un simple cambio de fuentes o, del color del fondo, puede transformar a un site aburrido en un boom digital.

El éxito o fracaso de los sitios web depende, en gran parte, del impacto estético que este pueda transmitir. Aunque no existe una regla rígida a seguir sí hay algunos parámetros, que se dan gracias a test de mediciones, que pueden ser más que útiles para potenciar nuestro sitio on line.

Como se dijo anteriormente, no hay un "diseño rey" el cual seguir, en gran parte debido a los diferentes tipos de información que circulan en la autopista digital. Por este motivo un sitio web dedicado a la muestra de productos, (un catalogo on line o un book de fotografía digital) podría funcionar muy bien si es realizado en Flash (aplicación altamente interactiva que hace parte de la suite de adobe para la creación web) pero sería un fracaso de diseño si se toma como plantilla para un site noticioso.

Algunos de estos tips de diseño se dieron a conocer gracias a un estudio llamado Eyetrack III generado por el Poynter Institute, el Estlow Center for Journalism & New Media y la firma Eyetools, el cual pretende medir que partes de un site informativo son las más llamativas.

Títulos cortos y blurbs llamativos

Una de las sorpresas del estudio es que la mayoría de participantes del Focus Group, no fueron seducidos en una primera instancia por las fotos sino por los títulos. En un primer escaneo visual los títulos se llevaron la medalla de oro. Los más llamativos y poco extensos fueron los que hicieron que los usuarios profundizarán en las notas de prensa. Si falta el gancho, la nota pasa desapercibida.

Otro item que llama la atención a los navegantes es el llamado blurp (pequeño lead que habla acerca de la nota), después del titulo son los más leídos y son vitales para que el usuario decida leer o pasar a la siguiente nota.

Arriba y a la izquierda, combinación ganadora

Al igual que en el papel, en la web existen zonas más calientes que otras, la ubicación arriba a la izquierda es la más popular a la hora de ojear los sites. No obstante arriba a la derecha y abajo a la izquierda son zonas que también llaman la atención.

La receta de los menús

El menú es la herramienta más clara a la hora de sumergirse en los sitios. varios menús, en diferentes partes de la pantalla, hacen que el lector termine desertando, puesto que tiende a confundirse y también a aburrirse, la mejor opción de ubicación reparte honores entre el lado zurdo de la pantalla y la parte de arriba, sin embargo, la prueba demostró que los menús incrustados en la parte derecha de la pantalla no tienen mucho rechazo.

Muerte al Scroll horizontal

Dentro de los sites informativos, afortunadamente, no es muy común la navegación horizontal, según la prueba, la navegación vertical no es una gran molestia para el usuario, pero por el contrario, tener que desplazarse de modo horizontal hace que el usuario en poco tiempo pierda el interés.

Letra menuda, la más llamativa

A la hora de regar texto, los que ganan más lecturabilidad, son aquellos que están compuestos por letras pequeñas. Pequeñas si pero no absolutamente mínimas, ya que si hacen esforzar los ojos del usuario este terminará por desertar de la lectura.

Las fuentes clásicas siguen estando a la moda y la economía textual manda la parada. Párrafos generosos y robustos hacen son detonantes para que el usuario cambie de página.

Los clásicos que perduran

En la web, al igual que en la mayoría de publicaciones, hay ciertas píldoras clásicas que es bueno no olvidar. El uso de colores contrastados y no complementarios, el respeto a las identidades corporativas (colores, logotipos, logosímbolos, ), la limpieza en las partes donde hay texto y la generosidad espacial a las fotos, ayudarán a aumentar el tiempo de visita de los sites noticiosos.

Wednesday, August 16, 2006


Convergencia a dos bandas
Por Mauricio Riveros




La convergencia es una palabra muy de moda en la actualidad. Como era de esperarse los medios de comunicación no han quedado rezagados en este aspecto y bajo la excusa de una “Democratización de la información”, las salas de redacción de los medios alrededor del mundo, se han convertido en un ejemplo vivo de esta convergencia que nos toca actualmente.
foto de: www.gamedev.net/.../1/press_staff_small.JPG

Esta convergencia se vislumbra claramente en dos aspectos básicos, la convergencia de staff y la convergencia profesional, cada uno necesario en la actualidad, pero sin embargo, no son una regla.

La convergencia de staff se basa en hacer que los periodistas tradicionales y los periodistas digitales, logren hacer parte de un mismo staff (grupo laboral) acoplándose fácilmente a la forma de trabajo. Si bien es cierto en varios medios de comunicación se han dado pasos gigantescos, como por ejemplo en el Financian Times, dónde en 1999 se unificaron las dos redacciones dando las mismas condiciones a todos los periodistas (tanto en cargas laborales como en retribuciones económicas).

Sin embargo aun es común que se de un trato diferente a los periodistas que cubren para los .com, pagas diferentes al igual que las cargas laborales, generan una brecha que no ayuda mucho al proyecto convergente. Pero no solo ahí está el inconveniente, entre los mismos redactores ahi roces, por ejemplo, algunos periodistas tradicionales ven a los reporteros digitales demasiado superficiales y muchos periodistas digitales ven a los periodistas tradicionales como obsoletos.

Esta competitividad mal sana hace que se dificulte el proceso de convergencia, puesto que lo único que se hace es juntar dos redacciones en un mismo espacio en lugar de unificarlas y potenciarlas.

Por otro lado está la convergencia profesional, que si bien es cierto es importante en cuanto a competencias profesionales en el periodista, en muchas redacciones se ha abusado del tema sobrecargando de trabajo a unos pocos periodistas por la misma paga y desistiendo de los servicios de otros.

Esta convergencia se resume en que para generar contenidos multimedia, que en sí el fuerte del periodismo digital, se debe ser competente en todos los campos que se usan para generar contenidos (audio, fotografía, video, diseño, escritura).

Esto implica un esfuerzo por comprender los discursos y hacerlos coherentes, por lo cual no solo sirve conocer el aspecto técnico (por ejemplo el simple hecho de saber manejar una cámara fotográfica) sino también adecuar el lenguaje de cada producto para que sea veraz (conocer algo de teoría y semiótica de la imagen).

Todos estos procesos poco a poco van ganando terreno en el mundo de los mass media, sin embargo, aún falta una buena parte del camino por recorrer para creer ciegamente que toda la información terminará llegando exclusivamente a este punto pero, tampoco se puede cerrar la página, apagar el dial o el tv y creer que el periodismo digital no existe, por que existe y cada día hace más ruido.